Felicidad y paz a la vez

Si vives para ser feliz en este mundo, un solo problema te derrumbará.
Si vives en función de obedecer a Dios, podrás ser feliz; y además encontrar la paz que ni la muerte te quitará.

Corre hacia Dios

Mientras estés joven y tengas las piernas fuertes, corre hacia Dios; ya llegará el día en que las piernas no te den más y debas caminar.

Ese día agradecerás que te cansaste corriendo y estarás más lejos de los problemas.

Fíjate que la gente que te invita a ir despacio es porque quiere que tú estés más cerca de ella que de Dios.

Sean el trigo

No sean la paja que se deja llevar por el viento de los problemas y de lo terrenal. Si lo hacen, se esparcirán por el campo y nadie les podrá recoger.

Sean más bien el trigo, que no se deja llevar por el viento; y aunque vayan a ser triturados y vueltos harina, serán convertidos en el pan de vida para la vida eterna.

Vivir con menos peso

"Muy pesada es vuestra terrenalidad.

Si ustedes decidieran todos los días más por Dios que por el mundo;

o si las cosas del mundo las llevaran en función de Dios,

vuestro peso se aligeraría."

He vuelto para ti

Yo Soy tu Señor y he vuelto para ti.
He vivido y he vencido; y ahora que nos hemos encontrando de nuevo quiero que me acompañes.
Alrededor de ustedes crearé un nuevo mundo; el Reino de Dios en la Tierra.
Levántate y sígueme; comprométete por Dios y por mí.
Los Ángeles del Cielo te acompañarán en cada momento si sustituyes tus afanes terrenales por buscar servir y agradar a Dios según sus designios.
Yo he vivido por Dios y para Dios y he vencido; ahora te necesito a ti.