Esta puede desgastar cualquier energía que se reciba para sanar; puede sabotear cualquier intención de mejora; puede crear nuevos procesos patológicos; o peor aún, puede hacerte creer que lo estás logrando mientras que el malestar sigue destruyéndote internamente. Y todo esto tratando de mantener su "zona de confort" incluso con malestar.
Es por esto por lo que los animales responden más rápidamente a cualquier abordaje integral de sanación. Ellos son más emocionales que mentales; ellos no se autosabotean.
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