Lo primero a desarrollar

Lo primero que una persona debe desarrollar es una conciencia real sobre la predominancia de Dios en su vida y de lo importante que es ella misma para Dios.
Cuando esto se consigue en una cantidad mínima pero indispensable, la persona comienza a entender: la importancia de someter su vida a enseñanzas sagradas; lo indispensable de tener un maestro espiritual para que le enseñe a hacerlo; y la necesidad de pertenecer a un grupo de personas que estén intentando hacer lo mismo alrededor del maestro espiritual, para así practicar dicha enseñanza.
En resumen, cuando el alma de una persona logra entender que ella pertenece a Dios, comienza a entender y a afanarse en un escenario de Crecimiento Espiritual.
Esto representa la mínima autoconsciencia espiritual indispensable.