La espiritualidad se sustenta directamente en tu compromiso de vida con Dios.
No tiene nada que ver con pensamientos bonitos, ni afirmaciones positivas, ni rituales mágicos, ni energías, ni seres de luz, ni demonios, ni muertos, ni astros, ni fenómenos extrasensoriales ni paranormales, ni nada de eso.
Por esto es que hay muy pocas personas realmente espirituales y tantas que creen serlo.
No tiene nada que ver con pensamientos bonitos, ni afirmaciones positivas, ni rituales mágicos, ni energías, ni seres de luz, ni demonios, ni muertos, ni astros, ni fenómenos extrasensoriales ni paranormales, ni nada de eso.
Por esto es que hay muy pocas personas realmente espirituales y tantas que creen serlo.
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