Para que Dios pueda hacer algo, hay que concederle que incluso las cosas difíciles sucedieron bajo su mirada y permiso; posiblemente porque eran necesarias o correspondían que fueran. Seguramento no lo entenderemos, pero debemos confiar en que Él sí sabe lo que hace. Esta es la "fe verdadera" que deberíamos tener del tamaño de un grano de mostaza. Solo entonces, Él sí podrá comenzar a resolver los problemas.
domingo, 8 de febrero de 2015
Injusticia en el mundo
Para que Dios pueda hacer algo, hay que concederle que incluso las cosas difíciles sucedieron bajo su mirada y permiso; posiblemente porque eran necesarias o correspondían que fueran. Seguramento no lo entenderemos, pero debemos confiar en que Él sí sabe lo que hace. Esta es la "fe verdadera" que deberíamos tener del tamaño de un grano de mostaza. Solo entonces, Él sí podrá comenzar a resolver los problemas.
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